
Ferrer mostró su mejor tenis y no se lo puso nada fácil al mallorquín. Pese a la diferencia de puestos en el ranking de la ATP, el alicantino demostró ser un digno contrincante del número dos del mundo.
Sin embargo, el encuentro sufrió su primera interrupción cuando, igualados a cuatro, el juez tomó la decisión de suspenderlo a causa de la lluvia.
Tras 45 minutos de descanso forzado, Nadal regresó a la pista con más fuerza y dispuesto a llevarse el título a casa. Consiguió romper el saque de Ferrer hasta conseguir ganar el primer set (7-5).
En la segunda manga, el valenciano cometió dos dobles faltas consecutivas, que fueron aprovechadas por Nadal. En este set se vieron puntos increíbles desde el fondo de la pista, desde la red, con derechas cruzadas o defendiendo.
El partido iba tomando forma cuando, de nuevo, el juez volvió a interrumpir el juego por la lluvia. Sin embargo, esta vez tampoco hizo que Nadal bajara la guardia y continuara mandando en la pista.
Tras una hora de espera, ambos volvieron a la pista con ansia de victoria y Ferrer se adelantó en el marcador con un 5-4. Le duró poco la alegría, pues el balear empató a 5 en el juego siguiente y el valenciano erró varios golpes. El manacorí sirvió, pero el valenciano con extrema derecha al rincón logró punto de rompimiento. El mallorquín lo salvó con un gran saque abierto. Una volea dio bola de set al balear. El valenciano restó largo y Nadal ganó el set por 7-5 tras 67 minutos de juego.
Tras el partido, Nadal se mostró satisfecho, aunque en sus aspiraciones está "mejorar este récord, pero nunca se sabe. Tengo 23 años. Estoy muy contento de cómo me ha ido durante estos años. Para mí, 17 es un número muy importante, pero en una semana tenemos el torneo Madrid y voy a tratar de seguir ganando".
Además, haciendo gala de su humildad, el balear quiso agradecer al público su permanencia en la pista, pese a la lluvia, y también a su madre, Ana María, aprovechando que se celebra el día de la madre. “No está de más agradecerle todo lo que hace por mi".
Después de esta victoria, el de Manacor ya está a menos de 4.000 puntos del número uno del mundo, Roger Federer, y a 490 del número 2, Novak Djokovic.
Por su parte, David Ferrer ha mejorado cinco posiciones en el ranking de la ATP y se sitúa duodécimo, mientras que Fernando Verdasco, víctima del valenciano en semifinales de este torneo, se mantiene en la novena plaza.
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